lunes, 30 de agosto de 2010

En el baúl de los recuerdos

He estado poniendo orden en mis asuntos en la web, y mi blog no escapó. Acabo de publicar el primero de lo que espero sea una serie de devocionales (nada institucional, más bien cotidianos... As usually!). Se trata exactamente de la entrada anterior a esta.

Además, tomé algunos escritos previamente publicados en otro blog y los agregué a este, manteniendo las fechas originales en que fueron escritos. Para acceder a ellos les dejo los enlaces.
  1. Ropas de pecado, una reflexión inspirada en Spiderman 3 (Que hasta ahora, es mi favorita del hombre araña)
  2. Sin querer llegar a la meta
  3. Tropiezo para el pequeño
  4. Devoción maternal (Tal vez ya pasó el día de las madres, pero igual, no está de más que le echen un vistazo)

Una nueva devoción: "Sean santos"

Prólogo:
Una nueva devoción es una serie de devocionales con los que intento renovarme a mí mismo, volviendo a lo sencillo de la plática cotidiana con Dios. Serán testigos de no grandes y elocuentes escritos, mas bien de esbozos mentales que tarde o temprano se convertirán en conductas de un devoto amigo de Dios (que es lo que pretendo llegar a ser). Comienzo con algunos escritos que "redescubrí" haciendo un poco de limpieza.
Espero que sean de utilidad para renovarles en la piedad. Zabdiel David
Más bien, sean ustedes santos en todo lo que hagan, como también es santo quien los llamó;16 pues está escrito: "Sean santos, porque yo soy santo" 1 Pedro 1:15-16 (NVI)
Santo: en latín "sanctus", en griego "hagios", y en hebreo "qâdosh"; significa elegido o apartado (por Dios, ya que a Él unicamente pertenece este atributo)
La Biblia llama a la Iglesia un pueblo santo, es decir, separado de entre muchos para disfrute exclusivo del Señor. Pero que significa exactamente ser "santos de Dios". Tal honor implica una responsabilidad enorme: mostrar la calidad de nuestro Dios, mediante nuestra manera de vivir.

En un principio, Yahweh legó a Israel su codigo de vida para que demostraran a las demas naciones el privilegio de servirle. En el Nuevo Testamento, los gentiles somos invitados por Cristo a seguir los estatutos de Dios. Nuestra santidad radica en seguir las reglas divinas, lo que nos garantiza bendiciones. No obstante, hoy nos escandalizamos con las historias de inmoralidad y corrupcion en el Cuerpo de Cristo (como en su tiempo las hubo entre el pueblo hebreo)

El pastor y escritor norteamericano A.W. Tozer visualizó a la iglesia moderna como un pueblo carente de poder, sin respaldo del Cielo. Sus miembros no muestran las señales propias de aquellos que tienen al Espiritu Santo dentro de si. No es nuestra santidad lo que ve el mundo.
"Hoy tenemos santos teologicos, que pueden (y tienen que) probar que son santos apelando a citas del griego original. Necesitamos santos cuyas vidas proclamen que ellos son santos y que no necesitan acudir a la concordancia para lograr autenticidad."
(A.W. Tozer, Sendas que conducen al Poder, Publicaciones Adiel, 1990)
El mensaje es claro, el Espiritu Santo lo dijo milenios atras, y lo repitio desde el nacimiento de la Iglesia, a traves del Apoóstol Pedro:
"Como hijos obedientes, no se amolden a los malos deseos que tenían antes, cuando vivían en la ignorancia. Más bien, sean ustedes santos en todo lo que hagan, como también es santo quien los llamó; pues está escrito: «Sean santos, porque yo soy santo.» Ya que invocan como Padre al que juzga con imparcialidad las obras de cada uno, vivan con temor reverente mientras sean peregrinos en este mundo." 1 Pedro 1:14-17 (NVI)

lunes, 2 de agosto de 2010

Despójate o lo pagarás

...despojémonos también de todo peso y del pecado que tan fácilmente nos envuelve, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante. Hebreos 12:1 (LBLA)


Hoy cambie de aerolínea para mis viajes regulares. No tenía otra opción después que mi empresa de confianza eliminara los vuelos de Curaçao a Maracaibo.

No sabia cuan traumático podía ser viajar en un Embraer EMB-110P1 (créanme que el nombre es mas grande que el avión) cuando estas acostumbrado a un Boeing 737.
No tuve ni siquiera que subir al avión para recibir el gran impacto. Ocurrió haciendo el Check-in cuando la empleada de la aerolínea me dijo: ¿Está consciente de que lleva 15 kilos de mas en su equipaje?.

Había empacado pensando en un tope de 40 Kg. (en total fueron 35,3) y mi penalidad fue de 45 dólares (un total despilfarro si viviera en un país con control de cambios).
Una vez que pagué la multa (repito, de 45 dolares) me puse a enumerar todo lo que podría dejar para el viaje de regreso:
  1. La chaqueta de pana.
  2. El jean negro que me queda grande.
  3. la crema de afeitar (tengo otra en casa y tal vez mi hermano la necesite)
  4. (...)
Me resulta curioso que en una situación extrema las cosas que creíamos realmente indispensables (por eso estaban en el equipaje) carecen de valor y utilidad. Lo cual me lleva también a enumerar aquellas cosas (posesiones, hábitos, relaciones, compromisos, entre otras) que son un peso para difícil de soportar.
Miro en el espejo a un joven agotado como resultado de querer manejar una docena de cosas a la vez -¡Hasta el Pulpo Paul es capaz de solo elegir una a la vez!.

A veces siento que la vida transcurre en un 737, pero definitivamente en ocasiones solo podemos llevar 20 kilos de equipaje. ¿Alguien mas tiene que enumerar?.